La capilla original fue fundada el 2 de noviembre de 1773 y dependía de la ViceParroquia del Curato de Montevideo.

En 1780 se escindió, transformándose en Parroquia. Ello fue gestión del Obispo Malvar y Pinto quien propuso al gobernador de Montevideo, Joaquín del Pino, la creación de un curato en Las Piedras, con sede en la Capilla de San Isidro.

En el entorno de esta capilla se instalaron pulperías.

Posteriormente se inicia la construcción del actual templo desde julio de 1879, fue entregada por decreto del Presidente Gral. Máximo Santos a la orden de los salesianos, quienes allí instalaron un colegio que funciona desde el 15 de febrero de 1881.

La iglesia es obra de los catalanes Fongibell y Mayol. Su construcción comenzó el 23 de setiembre de 1855 y finalizó en 1868. El proyecto estaba inspirado en la arquitectura bruneleschiana del Cinquecento italiano, algo presente en las torres, bóveda y campanarios, todos de dicho estilo. Al momento de su fundación era considerada de las más esplendorosas de su época.

La construcción presenta dos torres elevadas, en una se encuentra un reloj y en la otra un juego de campanas. El reloj Bockenem fue inaugurado el 30 de setiembre de 1882 y el campanario está formado por cinco campanas. Estas fueron realizadas en la fundación de Juan Bautista de Poli, en Udine (Italia), y su instalación el 15 de setiembre de 1889 se efectuó sobre un castillo de madera de quebracho y herrería forjada a mano, idea del Ing. salesiano Domingo Delpiano, ejecutada por los Hnos. Juan y Ángel Zunino. Este campanario está ideado para interpretar cinco melodías. El techo y la nave central son una bóveda de hormigón armado y las naves laterales están cubiertas por bóvedas menores. Un sobre techo con estructura metálica protege el edificio.

Desde el año 2007, la Iglesia está protegida con Medidas Cautelares por la Intendencia Municipal de Canelones. En conjunto con el Colegio y la Casa de la Juventud, también de la orden salesiana, conforman un centro de culto y de actividad socio-cultural de referencia para la sociedad pedrense.

Es de destacar el valioso archivo parroquial donde se guardan las partidas de defunción de los muertos de la batalla del 18 de mayo de 1811. El sacerdote José Macías de Soto dibujó una flor crucífera al margen de cada una de ellas.

A partir de la resolución municipal Nº07/06939 el templo está protegida con medidas cautelares por la Intendencia Municipal de Canelones.

Fuentes:
Arquitecto Carlos A. Trobo.
Barrios Pintos, Aníbal. 1981. Canelones. Su proyección en la historia nacional. Tomo I. Intendencia Municipal de Canelones.
Dirección Nacional de Catastro. Oficina Delegada de Canelones.
Prof. Marcel Suárez
Prof. Ana María Rodríguez de Rocamora